Fuente: https://www.undp.org/

En el año 2000 la ONU acuerda los ocho Objetivos del Milenio, que tuvieron un plazo de cumplimiento de 15 años. Para el año 2012, en la Conferencia sobre Desarrollo Sostenible Río+20, dado que los objetivos del milenio no eran suficientes, se empezaron a esbozar los objetivos de desarrollo sostenible (ODS).

En el septiembre del 2015 en una cumbre histórica en las Naciones Unidas, los países miembros, aprobaron los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible que contemplan 169 metas y 231 indicadores. Estos objetivos entraron en vigor oficialmente el 1 de enero del 2016 y son parte fundamental de la Agenda 2030 para el Desarrolla Sostenible.

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible fueron elaborados tomando en consideración temas de crecimiento económico, la inclusión social y la protección del ambiente. Van dirigidos a todos los países, dejando atrás viejos paradigmas donde unos países donan mientras otros reciben ayuda condicionada.

Se ha visto que los países miembros y participantes de los ODS, han tomado los objetivos como una herramienta de planificación y seguimiento; ya que a largo plazo constituyen una guía y un apoyo para cada país en su camino hacia el desarrollo sostenido, inclusivo y en armonía con el ambiente.

Muchas veces sentimos que estas metas que se tratan en las grandes esferas mundiales están distantes de nuestra realidad y cotidianidad, de hecho sentimos que son responsabilidad de alguien más, de las autoridades, del gobierno, de los empresarios…. Pero No! Todos somos parte del cambio y podemos hacer cosas en el día a día que marcarán la diferencia y colaborarán al cumplimiento de los objetivos.

 

COLABORANDO CON LOS OBJETIVOS DE DESARROLLO SOSTENIBLE…

Energía

  • Ahorre electricidad enchufando los electrodomésticos en una regleta y desconectándolos por completo cuando no los utilice, incluso las computadoras.
  • Apague las luces. La televisión y la pantalla del ordenador ya emiten una luminosidad cómoda, así que apague las otras luces si no las necesita.
  • Evite precalentar el horno. A menos que necesite una determinada temperatura de cocción, empiece a calentar la comida justo al encender el horno.
  • Sustituya los electrodomésticos viejos por modelos que aporten un consumo energético más eficiente y cambie las bombillas de la casa.
  • Si puede, instale paneles solares en su casa. De este modo, también se reducirá su factura de electricidad.
  • Seque las cosas al aire. Deje que el pelo y la ropa se sequen de forma natural en lugar de encender una máquina. Cuando lave la ropa, asegúrese de que la carga está completa.
  • Desplácese en bicicleta, andando o en transporte público. Evite utilizar el coche excepto cuando tenga un grupo grande de personas.
  • Deje de utilizar los estados de cuenta bancarios en papel y pague sus facturas en línea o a través del teléfono móvil.
  • Tome duchas cortas. Las tinas necesitan muchos más litros de agua que una ducha de entre 5 y 10 minutos.

Alimentos

  • Compre productos que estén mínimamente empaquetados. Lleve sus fundas reusables.
  • Apoyar los negocios locales ayuda a la gente a conservar su empleo y contribuye a impedir que los camiones tengan que desplazarse grandes distancias.
  • Planifique las comidas, haga listas de la compra y evite las compras impulsivas. No sucumba ante los trucos de comercialización que le llevan a comprar más alimentos de los que necesita, sobre todo en lo que respecta a los productos perecederos. Aunque pueden ser más baratos por peso, al final pueden resultar más caros si tenemos que desechar gran parte de esa comida.
  • Compre fruta de aspecto raro: muchas piezas de fruta y verdura se tiran por no tener el tamaño, forma o color «adecuados». Al comprar estas piezas de fruta que están en buen estado a pesar de tener un aspecto raro, ya sea en el mercado del productor o en cualquier otro lugar, estamos utilizando alimentos que de otro modo podrían acabar en la basura.
  • Coma menos carne y pescado. Se destinan más recursos para la obtención de carne que para el crecimiento de las plantas.
  • Congele los productos frescos y las sobras si no va a poder comerlos antes de que se estropeen. También puede hacerlo con la comida para llevar o de reparto, si sabe que no le va a apetecer comerla al día siguiente. Así, ahorrará comida y dinero.
  • Intente tener un huerto en casa, y use fertilizantes orgánicos. Utilizar los restos de alimentos como abono puede reducir los efectos del cambio climático al mismo tiempo que se reciclan los nutrientes.
  • Si tiene alguna pieza de fruta o algún aperitivo que no quiera, no lo tire. Déselo a alguien que necesite y esté pidiendo ayuda.

Desechos

  • Separe los desechos en casa, intentando reciclar. El reciclado de papel, plástico, vidrio y aluminio impide que los vertederos sigan creciendo.
    Utilice una botella de agua y una taza de café reutilizables. De este modo, reducirá los desechos y quizá hasta pueda ahorrar dinero en la cafetería.
  • Lleve su propia bolsa a la compra. Deje la bolsa de plástico y empiece a llevar sus propias bolsas reutilizables.
  • Coja menos servilletas. No necesita un puñado de servilletas para la comida que compra para llevar. Tome solo las que necesite.
  • Intenta generar menos basura, ya que la mayor parte acaba en los océanos.

Social

  • Mantenga el coche en buen estado. Un coche a punto emitirá menos gases tóxicos.
  • Done lo que no utiliza. Las organizaciones benéficas locales darán una nueva vida a su ropa, sus libros y sus muebles poco usados.
  • Vacúnese y vacune a sus hijos. Proteger a su familia de enfermedades también ayuda a la salud pública.
  • ¿Todo el mundo en el trabajo tiene acceso a atención médica? Averigüe qué derechos le asisten en el trabajo. Luche contra la desigualdad.
  • Asesore a los jóvenes. Constituye una manera atenta, estimulante y eficaz de orientar a las personas para mejorar su futuro.
  • Las mujeres ganan entre un 10% y un 30% menos que los hombres por realizar el mismo trabajo. La desigualdad de remuneración persiste en todos los entornos. Exprese su respaldo del principio de igual salario por trabajo igual.
  • Alce la voz contra todo tipo de discriminación en su oficina. Todas las personas son iguales independientemente de su género, raza, orientación sexual, origen social y capacidad física.
  • Organice en el trabajo una Semana Sin Impacto Ambiental. Aprenda a vivir de manera más sostenible durante al menos una semana.
  • Analice y modifique las decisiones cotidianas. ¿Tiene la posibilidad de reciclar en su lugar de trabajo? ¿Realiza su empresa adquisiciones a proveedores que llevan a cabo prácticas perjudiciales para el medio ambiente?
  • La responsabilidad social empresarial ¡es importante! Anime a su empresa a colaborar con la sociedad civil y a encontrar formas de ayudar a las comunidades locales a lograr los objetivos.
  • Comparta, no se limite a hacer clic en “me gusta”. Si ve una publicación interesante en las redes sociales sobre los derechos de la mujer o el cambio climático, compártala para que las personas de su red también la vean.
  • ¡Hable alto y claro! Pida a las autoridades locales y nacionales que participen en iniciativas que no dañen a las personas ni al planeta.
    Investigue un poco por la red y compre solo en empresas que sepa que aplican prácticas sostenibles y no dañan el medio ambiente y consuma esos productos.